
Estoy a cargo de coordinar un programa de desarrollo deportivo denominado EIDE (Escuelas de Iniciación Deportiva) que comenzó en el 2016. La propuesta era apoyar a estas escuelas, que se distribuyeron por todo el país, casi 2.000, dándole material y un sueldo, durante 8 meses a recursos humanos. El tenis de mesa tuvo poca más de 20 escuelas el primer año, 40 el segundo año y este año, como consecuencia de la crisis económica hubo una reducción importante del presupuesto destinado a este programa, se complicó todo y no es solo responsabilidad de "la vaca"...